¿Cómo se puede incorporar la utilización de “paciente simulados” para la formación de competencias genéricas?
Las instituciones de educación superior que imparten carreras de áreas de salud, se han preocupado continuamente por la calidad y la permanente actualización de los programas de estudio, con el fin de lograr que la formación de profesionales sea pertinente a las exigencias de un mundo en constante cambio. Los modelos curriculares han integrado diferentes conceptos, como lo es en nuestro caso la orientación en competencias, que privilegia el aprendizaje y el papel activo del estudiante, que es quién debe desarrollar habilidades que le faciliten su aprendizaje. En la formación de los profesionales de salud, se exige altos estándares científicos y tecnológicos, que incluyan otros dominios tales como comunicación efectiva, manejo de recurso en crisis, trabajo en equipo, entre otros. El contacto con pacientes siempre ha sido una parte elemental de la formación de los profesionales de la salud; se entiende que la interacción precoz con pacientes acrecienta la motivación de los estudiantes, admite una transición gradual entre los años preclínicos – internados, y favorece que el estudiante aprenda sobre temas que son difíciles de abordar desde el plano teórico, tales como empatía, responsabilidad por el paciente, manejo del estrés. Por otra parte, la observación de los estudiantes en interacción con sus pacientes permite el aprendizaje basado en competencias. Por otro lado, la magnitud y las causas de los daños ocasionados a los usuarios por prácticas en salud, requiere encontrar soluciones innovadoras o adaptar a diferentes contextos soluciones de efectividad demostrada. Por ello, han surgido investigaciones encaminadas a promover la seguridad del paciente, en el que se identifiquen situaciones clínicas que generen riesgos, por ejemplo, infecciones asociadas a la atención sanitaria, eventos adversos relacionados con los medicamentos, cirugía y anestesia, administración de inyecciones sin precauciones de seguridad, entre otros.
¿Cómo se puede utilizar la simulación clínica para incorporar competencias tanto técnicas como genéricas?
Dado que en la simulación clínica interaccionan conocimientos, habilidades y factores humanos con el fin de proporcionarnos un método de aprendizaje y entrenamiento efectivo para lograr que los estudiantes desarrollen destrezas, ofreciendo la oportunidad de realizar una práctica análoga a la que desarrollará en sus prácticas El objetivo fundamental de todo sistema de aprendizaje es el autoanálisis y la incorporación por el alumnado de los contenidos; lo consideramos, por tanto, de una evaluación constructiva.
En los ambientes educativos brindan oportunidades de aprendizajes mediante simulaciones en el cual, como menciona Dieckmann (2009), se genera una práctica social entre los participantes que interactúan entre sí, con el simulador, con los pacientes simulados y con los docentes; y de esta forma alcanzar objetivos individuales o grupales.
La Ley de Derechos y Deberes de los pacientes recalca la importancia de un balance favorable en la relación equipo docente-paciente, que se fundamenta en la entrega de una atención centrada en los pacientes, promoviendo una cultura de calidad y seguridad en toda la actividad. La simulación clínica tiene como fin representar experiencias reales de pacientes a través de escenarios adecuadamente guiados y controlados: esto permite al docente centrarse en el estudiante, pero enfocado en el paciente.
¿Qué es un paciente simulado?
Un paciente simulado (PS) es una persona que no padece una enfermedad, sino que la simula o actúa para fines docentes, siendo capacitado para aportar a la docencia o evaluación desde el rol de paciente. La simulación con PS está siendo utilizada en la mayoría de las escuelas de medicina en Estados Unidos de Norteamérica, Canadá y Europa, y también en la formación de otros profesionales de la salud como odontología, medicina, fonoaudiología, nutrición, kinesiología y enfermería. Los beneficios de incluir PS en la formación de los profesionales de salud son diversos. Los PS son capaces de representar los detalles de un caso en forma fidedigna y mantener uniformidad en su estilo emocional y comunicacional especialmente si su entrenamiento incluye el uso de videograbación (debriefing posterior) y si hay una evaluación de su desempeño a nivel formativo o evaluativo.
En el pregrado se recomienda utilizar casos “simples” en los primeros encuentros de los estudiantes con PS, y luego incluir escenarios que sean dificultosos y que los estudiantes los enfrenten en el mundo real: contextos de emergencia o de poca periodicidad, pero de alto impacto; conceder una mala noticia; educar y ayudar a un paciente a un cambio en su estilo de vida, entre otras más.
Un PS bien capacitado es capaz de observar cuidadosamente lo ocurrido durante la entrevista, recordar los detalles de las competencias demostradas por el estudiante y luego entregarle esta información en forma constructiva y acorde con las necesidades de aprendizaje. En su retroalimentación el PS puede lograr sintetizar una visión objetiva del desempeño del estudiante durante la entrevista con una visión subjetiva desde su propia experiencia como paciente y así complementar la retroalimentación generada por el docente.
La simulación permite que los estudiantes se familiaricen con situaciones extraídas fielmente de la realidad asistencial y que se representan en una sala en la que ellos interactúan y donde se supone que adquieren conocimientos, habilidades y conductas. Sin embargo, está aceptado por los expertos en simulación que la adquisición de competencias individuales en habilidades clínicas no es suficiente; la coordinación del equipo, la comunicación y la cooperación son esenciales para una práctica asistencial eficaz y segura.
¿Te has preguntado como perciben los estudiantes la simulación?
Te cuento acerca de: “Los beneficios y dificultades del uso de PS en la educación de los profesionales de salud”
¿Cómo los estudiantes perciben la simulación?
Los estudiantes valoran la posibilidad de aprender en un clima seguro, donde el error no tiene mayores consecuencias que la posibilidad de generar una instancia para revisar dónde estuvo el error. Los estudiantes perciben que tanto PS como pacientes reales son un gran aporte a su aprendizaje distinguiendo ventajas y desventajas específicas a cada encuentro, valoran por su autenticidad, el aprendizaje con PS por el feedback del PS y la posibilidad de practicar sus habilidades comunicacionales.
En Medical Factory siempre comprometidos con fomentar la cercanía con nuestras Instituciones de Educación Superior, te recordamos si tienes cualquier duda , nos puedes contactar en contacto@medicalfactory.cl y nos visites en https://medicalfactory.cl/. Te comentamos que siempre estamos actualizados dentro de la incorporación de nuevas metodologías y los últimos avances en la simulación clínica, contando con Expertos y un grupo de Asesores que podrán apoyarte en todo este proceso en la mejora, desarrollo e implementación de tu Centro de Simulación Clínica.